Las huellas ocultas del Palacio del siglo XVI

En el verano del año 2020 se descubrió en la planta noble del palacio un extraordinario tímpano decorado que formaría parte de la decoración de un acceso lateral a la sala principal del edificio, una de las partes originales que se conservan del siglo XVI. Según la opinión del asesor histórico de la Real Maestranza y del informe del restaurador del tímpano, posiblemente en la reforma del siglo XVIII se optó por cubrirlo por una cuestión funcional, o simplemente porque su presencia no era del agrado de los nuevos propietarios .

La obra aparecida se compone de un arco de medio punto que presenta un tímpano decorado con yeso artesano modelado en relieve sobre ladrillo. En el escudo de Donlope se disponía en campo de plata un lobo pasante de sable sobre tres torres de gules. En el tímpano se representa en el escudo heráldico con un lobo sobre tres torres almenadas. Flanquean el escudo dos amorcillos o putti montados sobre bestias. Las jambas del arco estaban decoradas con molduras y la basa se ha perdido casi en su totalidad. Originalmente la decoración debía ser dorada y policromada.

Dada la disposición lateral del arco en el muro, todo apunta a que en el lado contrario podría encontrarse otro arco de acceso a la estancia principal con un tímpano decorado de forma análoga, colocado de forma simétrica. Este otro arco podría hallarse oculto dentro del lienzo mural o haber desaparecido en alguna de las reformas del interior del edificio. Seguramente estaría decorado con el escudo de la familia de su mujer, Leonor Lacabra. No sería el único lugar de la Casa-Palacio en el que ambos escudos aparecen emparejados, como en las esquinas del alero de madera que dan a la calle Dormer.